Catorce horas sin luz en Mallín Ahogado

Las excusas fueron diversas. Lo concreto, pobladores del sector rural soportaron la semana pasada varias horas sin la provisión de energía eléctrica. Los cortes también se sucedieron desde el miércoles -por cinco horas-, en distintas zonas del casco urbano.

Por otro lado, los inconvenientes afectaron el comienzo de la Fiesta Nacional del Lúpulo, cuyas pruebas de sonido y la iluminación del predio se demoraron por el inconveniente.
A la interrupción del suministro, que llega en forma precaria desde el sistema interconectado del noroeste del Chubut (hubo un incendio a la altura del Paralelo 42°), se sumó después el estallido de un transformador en el barrio Las Quintas, que provocó un incendio de pastizales.

Comerciantes de la avenida principal y de los puntos más alejados del centro se quejaron por igual por la mercadería que debieron tirar debido a las complicaciones para mantener las cadenas de frío.

“La letra chica del contrato que cada usuario hace con EDERSA sostiene que la empresa no se hace responsable por la eventual suspensión del servicio”, es lo único que argumentaron desde la compañía prestataria. “El calor de hasta 40 grados que soportó la región y la carencia de reserva fría”, fueron otros argumentos expuestos”.

Empresarios recordaron que “estamos en plena temporada turística y la gente tiene que soportar horas dentro de las cabañas sin aire, sin heladera, sin televisión. Es una vergüenza que la vamos a pagar como destino, esto es mala publicidad”.